Fiesta en la granja
Un pato llamado Alfonso, una oveja llamada Doris y una cabra llamada Zulema debatían que ponerse para la gran fiesta. Recién, habían recibido las invitaciones y de repente todos estaban muy entusiasmados.
Rubén, un cerdo muy rosado y muy elegante brindaba una fiesta inigualable por la llegada de la primavera. Planeaba todo muy cuidadosamente, no se le escapaba ningún detalle y era un excelente anfitrión. Claro, no era esta la primera fiesta que organizaba, ya era conocido entre todos los animales por estas fiestas que ocurrían con el cambio de las estaciones y duraban hasta el amanecer. Para esta ocasión había preparado él mismo unos centros de mesa de pasto y flores, cientos de luces multicolores colgando de árbol a árbol y música muy bailable.
El sábado por la mañana todos corrían enloquecidos, desfilando sus mejores vestidos y peinados. ¡Qué impresión se llevaron los invitados, cuando Alfonso, Doris y Zulema aparecieron disfrazados de superhéroes! Haciendo reír a todos y sorprendiendo a otros, porque la diversión está en la diferencia y ser diferente y original es siempre divertido.
Los tres amigos fueron criticados por unos y alabados por otros, sin perder su sonrisa celebraron la entrada de aquella primavera de manera diferente y sin igual.